✨ Cómo manejar las emociones? 🤐
Saludos a todos y les damos una vez más la bienvenida a nuestra página. El día de hoy les traemos una descripción y comparación, de lo que son las emociones; pero no en el sentido estricto del concepto, sino en como se manifiestan en nosotros día a día y como debemos asimilarlas.
Cómo bien es sabido, las emociones son un conjunto de reacciones propias del ser humano; y que provienen de la interpretación que la mente otorga a cada situación. Este tema también lo hablamos, con otro enfoque, en nuestro artículo de «que es el Ego«. Aunque según algunos argumentan, que es en sentido contrario, y que las emociones son producto de sustancias químicas que produce el cuerpo; pero esto hay que aclararlo.
Tomemos el ejemplo de la situación que se vive en una montaña rusa; allí suben un grupo de personas, pero para unos representará, que su cuerpo producirá adrenalina junto con algunas sustancias asociadas al placer como las endorfinas; y para otras será adrenalina junto con las hormonas asociadas al miedo como la catecolamina.
Tratemos de entender La Emocionalidad…
Obviamente, estás sustancias no se producen de manera independiente, sino que son el producto de la interpretación que nosotros le damos a una situación. Por ende, lo que en nuestra vivencia resulta algo emocionante para unos, para otros es motivo de miedo. De este modo, nuestro cuerpo siempre responde a nuestra interpretación de cada situación.
Si nuestra manera de pensar no fuese la que produjera estos cambios físicos, quedaría anulada la capacidad de razonar del individuo; convirtiéndolo en esclavo del cuerpo.
Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil.
Mateo 26:41, Reina-Valera 1960 (RVR1960)
Bastaría con solo una inyección de alguna sustancia para cambiar la conducta humana. Cosa que la psicología siempre ha querido proponer. Pero estos se basan en los estudios sobre las sustancias químicas que se producen en el cuerpo en cada situación; y esto es lo que ha hecho que desde sus inicios, pretendan «sanar patologías» con tratamientos químicos.
Las Pasiones no deben Controlar el Cuerpo 💣
Siempre han defendido estos argumentos con el solo propósito de demostrar que el alma no existe, y claro con esto, negar la existencia de la Espiritualidad. Resulta fácil decir que una persona que tiene un comportamiento agresivo, hiperactivo o con otro tipo de impulsos, «mejora» cuando toma un «tratamiento» adecuado. Este ha sido un engaño muy peligroso, defendido desde sus inicios por charlatanes. Que una persona hiperactiva permanezca drogada con sustancias químicas, no quiere decir que «mejoró».
Así como no se curan las convulsiones con lobotomía física; porque obviamente una persona con el cerebro destruido por una lesión, ya no tendrá actividad cerebral. Así tampoco una persona que padezca una lobotomía química, podrá considerarse sana; ni se puede querer argumentar con esto, que las sustancias químicas producen los comportamientos.
Es el alma, nuestra esencia, la parte que nos hace individuos más allá del cuerpo; la que influye sobre nuestro comportamiento al decidir cómo manejar cada situación. Por lo que el cuerpo simplemente responde a las órdenes que nosotros le damos.
Ser una persona Emocional…
Cabe destacar, que el cuerpo tiene su propio lenguaje, el cual se manifiesta en sensaciones, que provienen del sentir del cuerpo. Así como el frío, el calor, el hambre, el sueño, el deseo sexual, etc. Que son necesidades del cuerpo, para satisfacer sus ciclos alimenticios, de recuperación energética, de descanso, reproductivos, etc.
El cuerpo es el vehículo de nuestra alma, y como tal sufre desgaste de uso y debemos reponer lo que consumimos de él. Cada una de estas sensaciones, producen satisfacción al cuerpo cuando son cubiertas; y allí nuestra mente, conciencia, criterio o decisión, que reposa en nosotros como individuos, debe tener autoridad para tomar control.
Debemos mantener control sobre cada uno de estos impulsos, ya que cada persona tiene la facultad en su libre albedrío, de decidir que hacer. Así puedo elegir si al sentir hambre, me como algo que puede haber en un basurero camino a casa; o decido esperar a llegar para consumir lo que me conviene.
➡️ Vinculo entre Conducta y Deseo
Este ejemplo es aplicable a cada situación, siendo posible que al sentir apetito sexual, decido esperar a estar con mi pareja; en lugar de considerar estar con cualquier mujer o desahogarme de maneras menos naturales. Todos estos impulsos son naturales, pero son corrompidos en el momento que nos aferramos a ideas; para plantearnos argumentos que le den validez a nuestras decisiones. Así nos llenamos de excusas para justificar nuestro comportamiento.
Todo debe centrarse en la decisión que nosotros adoptemos de como regular nuestro día a día. Si yo decido vivir en función de dar servicio a mi cuerpo; entonces las emociones se vinculan con las sensaciones, y entro en un ciclo de adicción a ciertas actividades (Romanos 8:5).
No seamos Esclavos de la Carne… 😣
Supongamos que asumimos la manera de pensar, de que el comer es lo más importante en la vida del ser humano. Entonces el imaginar o ver comida, se convierte en una emoción que libera gran cantidad de sustancias que dan placer. Y al sentir hambre, el cuerpo tiene la sensación de que debe alimentarse, al hacerlo recibe una dosis de hormonas que lo relajan. Volviéndose el simple proceso de alimentarse, un círculo vicioso que atrapa al individuo y que se repetirá cada vez que sienta un poco de hambre.
Así ocurre con cada necesidad. El individuo puede cumplir con la cobertura de cada una de ellas, sin exceder lo básicamente requerido. Todo lo que sobrepase lo básico, se vuelve un trastorno, que traerá consecuencias cada vez más graves sobre nuestra vida. El quererse a sí mismo, implica pensar en el valor que tiene mi bienestar para mí.
Porque los que son de la carne piensan en las cosas de la carne; pero los que son del Espíritu, en las cosas del Espíritu.
Romanos 8:5, Reina-Valera 1960 (RVR1960)
➡️ EL AUTOESTIMA
Si decido comer mucho, traerá sobrepeso, que implica problemas cardíacos, de circulación, entre otros. Si decido el sexo descontrolado, obviamente traerá la consecuencia de que una pareja estable y con ocupaciones diarias, no tendrá está prioridad a ese nivel. Lo que terminará en infidelidad, separaciones, enfermedades, etc.
Muchas son las emociones que podemos vincular con las sensaciones del cuerpo. Pero sobre todas ellas tenemos autoridad y decisión. Podemos vivir una vida normal, dónde las emociones y sensaciones forman parte de nuestro día a día. Y esto no se puede evitar por más que nos esforcemos.
Los descontroles sobre las emociones, producirán a mediano y largo plazo, variaciones en mi conducta que terminaran alejando a las personas que amo. Ya que el no ser capaz de regular los impulsos de la carne, transmitiré el mensaje de que solo vivo para a satisfacer mi propio bienestar.
La soledad y el rechazo, son las consecuencias que padecen las personas que no pueden controlar sus emociones. Esto repercute directamente en el autoestima del individuo, y puede conducirlo a la depresión.
Debemos desarrollar nuestra Espiritualidad
Simplemente debo tratar de no ser dependiente de los fenómenos corporales, y apegarme más a lo espiritual. En la medida que logremos manejar de manera prudencial nuestras emociones y sensaciones; podremos disfrutar de ellas cuando sea necesario, sin que sean ellas las que se aprovechen de nosotros.
No hay manera de apartarnos de la carne, porque aquí vivimos y hacemos uso de ella. Por esta razón, no debemos sentir vergüenza por las cosas que sentimos. Pero podemos desarrollar nuestra cotidianidad sin ser esclavos del cuerpo; sin que él sea quien determine mi camino. Que sea mi decisión la que me permita decidir que camino seguir.
Todos somos pecadores, y nuestros impulsos hacia los placeres son los que nos hacen así. Pero la Fe no se basa en negar nuestros pecados. Más bien se fundamenta en aceptarlos y reconocerlos, procurando que mi vida no sea movida por ellos. Vivamos enfocados en servir a Dios y cada día luchar para que éstas tentaciones no nos controlen.
Porque del corazón salen los malos pensamientos, los homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios, las blasfemias.
Mateo 15:19, Reina-Valera 1960 (RVR1960)
